Los probióticos, alimentos funcionales que ayudan a mantener la biota intestinal, son una de las tendencias al alza. Y dentro de ella, las bebidas probióticas son uno de los segmentos más activos. Con un crecimiento del 8’44% entre 2019 y 2024, esta categoría alcanzará los $46.000 millones al final de este periodo, según Market Watch. Una categoría caracterizada por la fragmentación, en la que numerosas propuestas de pequeños productores intentan hacerse con el favor del consumidor. Entre ellos se encuentra la española Komvida, una pequeña startup impulsada por dos emprendedoras extremeñas (Beatriz Magro y Nuria Morales) y que comercializa diversas variedades de Kombucha, la bebida probiótica de moda.
¿Qué es la kombucha?
La kombucha es una bebida milenaria elaborada a partir de té fermentado con un hongo llamado SCOBY (colonia simbiótica de bacterias y levaduras). A través de este proceso de fermentación, el té desarrolla probióticos que contribuyen a mantener la flora intestinal.
En el caso de Komvida, se utilizan cuatro ingredientes: té verde, agua de manantial, azúcar de caña y scoby. A ellos se les añaden otros ingredientes 100% naturales que dan lugar a sus seis variedades de sabores: Greenvida (té verde tradicional), Berryvida (frutos rojos), Gingervida (jengibre y limón), Manzana, vainilla y canela, Zanahoria y cúrcuma, y Kombujito (mojito).
Por su nivel de ventas a nivel mundial la kombucha es considerado la bebida funcional con mayor crecimiento por Forbes.
El mercado de bebidas probióticas crecerá un 8’44% hasta 2024, y alcanzará $46.000m
Komvida y Mario Sandoval
A estas variedades hay que añadir, el nuevo sabor premium elaborado en colaboración con el chef Mario Sandoval, y que extrae su sabor de la combinación de frambuesa, pétalos de rosa y flor de caléndula. Esta variedad, se comercializará por tiempo limitado en el restaurante Coque (2 estrellas Michelin), en la web de Komvida y en algún establecimiento seleccionado.
«Esta colaboración es una forma de mostrar que lo que vamos contando en los congresos de innovación gastronómica, se hace realidad y termina llegando al mercado. En este caso en forma de un producto en línea con las tendencias de las que hablamos de lo natural y lo saludable«, explicaba Sandoval. Esta variedad premium de Komvida combina el sabor de la frambuesa, el toque aromático de los pétalos de rosa y el exotismo de la caléndula y formará parte del menú de Coque en dos presentaciones diferentes.
“Mario fue una de las primeras personas de nuestro país en empezar a hablar de fermentados y experimentar con ellos. Es un convencido de su potencial y considerado uno de los expertos en esta bebida que, además de ser sana y saludable, está buenísima. No podíamos haber contado con un aliado mejor, explica Beatriz Magro, co-fundadora de Komvida.
Cómo se hace kombucha de Komvida
Komvida desarrolla su receta a partir de la fermantación natural de los cuatro ingredientes básicos, té verde y azúcar de caña ecológicos, agua de manantial y Scoby. A los que luego añaden distintos ingredientes aromáticos para lograr las variedades.
Tras un proceso de entre 2 y 4 semanas, el resultado es un refresco con finas burbujas producidas de forma natural por la fermentación, y un 2% de azúcar residual, ya que la mayor parte se consume durante la fermentación, al ser el «alimento de las bacterias». Para preservar los microorganismos vivos, no se pasteuriza, ha de mantenerse en frío y se comercializa en botellas de cristal.
Komvida cuenta con el sello ecológico europeo y es la única fábrica de kombucha de Europa con certificado IFS. Su envasado se realiza en vidrio reciclable por lo que solo se producen desechos biodegradables en su producción.
Sabores sorprendentes, ricos, con el punto justo de dulzor -2% de azúcar-y toque de gas
¿A qué sabe Komvida?
La primera impresión de Kom
vida es lo original de la gama de sabores: té verde, frutos rojos, jengibre y limón, manzana con canela, zanahoria y cúrcuma, y mojito. Es una propuesta que ya nos indica su objetivo de llenar momentos de consumo adultos, ligados al ocio o la indulgencia. En los que, por ahora, las opciones saludables y divertidas no son muchas.
He probado al menos cinco de los sabores, y en general todos son muy agradables, algunos incluso sorprendentes. (Frente a otros kombuchas que he probado tanto en España como en EEUU -donde son una auténtica fiebre- y que tenían un sabor algo «medicinal» y excesivamente empalagosos. Otro de los aspectos que más me ha gustado es precisamente es que es bastante menos dulce que otros kombuchas, y desde luego, mucho menos que los refrescos tradicionales. Finalmente, el toque de gas completa una experiencia, para mi gusto muy agradable.
Me encantaría que este tipo de producto se hiciera un hueco en el canal Horeca
Tengo la suerte de encontrarlo fácilmente en la tienda eco de mi barrio, pero me encantaría encontrármelo en bares y restaurantes. Solo o con imaginación, puede ser perfectamente la base de un cocktail o un mocktail como alternativa saludable para esos momentos de consumo fuera de casa.
Kombucha, un mercado en expansión
Desde su fábrica de Fregenal de la Sierra (Badajoz), con más de 20 trabajadores, la mayoría mujeres, Komvida distribuye a grandes superficies (Carrefour, Hipercor, Ahorramas, Alcampo, Starbucks…), pequeñas tiendas de alimentación, establecimientos de restauración y hostelería de España, Portugal, EE.UU y Panamá.
Actualmente, Komvida cuenta con más de 3.000 puntos de venta de España y Portugal. Además, recientemente ha comenzado a comercializar sus Kombuchas en Estados Unidos y Panamá, donde espera vender 250.000 litros el primer año. Además, Komvida planea expandir su alcance a Europa del Este, Reino Unido, Países Nórdicos, Francia y Alemania.
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