Innit, la compañía americana especializada en Smart kitchen, ha conseguido cerrar una nueva ronda de financiación de $18 millones aportada por sus fundadores e inversores estratégicos del sector de la alimentación y tecnológico. Con esta nueva inyección, la compañía de Redwood cuenta con una inversión total de $43 millones desde su nacimiento en 2013.
Pero quién es esta compañía que tiene un lema tan curioso como “Escucha a tu Comida”. Dos fundadores con trayectorias diferentes pero complementarias. Eugenio Minvielle, presidente, con más de 20 años de experiencia en el mercado de consumo en compañías como Unilever o Nestlé. Otro, Kevin Brown, CEO, procedente del mundo de la tecnología (Coraid, Kidaro, Decru, Inktomi) “donde he tenido oportunidad de conocer muy bien conceptos y tecnologías como cloud, Internet de las Cosa, aplicaciones móviles, big data o machine learning”, explica a TechFood Magazine el propio Brown.
“En 2013 decidimos fundar Innit, con la idea de unir nuestra experiencia para estudiar todas las formas en las que podíamos conectar los alimentos. Hay gente que conecta dispositivos a Internet, y eso está bien –incorporar wifi o prestaciones de control remoto. Pero el ingrediente perdido era cómo conectar la comida a la cocina. Es un ingrediente importante y es donde mucha gente se pierde. No sabe qué tiene, hace cuánto tiempo, si está todavía bueno, qué puedo hacer con eso, cómo lo preparo o cómo lo combino con otras cosas o creo algo nuevo…”
Muchos sectores de la economía se han digitalizado y la alimentación, la forma en la que cultivamos, compramos, o cocinamos nuestros alimentos, no es ajena este movimiento. El reto, en el que están muchos inmersos, incluido Innit, es cómo digitalizamos a los diferentes participantes en este sistema, con qué objeto y cómo encontrar modelos que funcionen.
Conectar la cocina y los alimentos
“En el campo de la cocina, lo que la gente quiere es que le faciliten la vida. Y de momento, ninguna compañía está haciendo esto, conectando la cocina y la comida para ayudar a los usuarios a llevar una vida más fácil, saludable, y llena de sabor. Por eso, en nuestro equipo incorporamos doctores en nutrición, en machine learning, en tecnología de sensores, en seguridad, en espectrometría…, y chefs. Tenemos al jefe de la French Culinary Academy trabajando con nosotros.”
¿Pero qué es lo que realmente hace Innit? No es un fabricante de electrodomésticos ni de gadgets conectados. Quizá por su trayectoria en el mundo tech, los fundadores de Innit han optado por un modelo más parecido al popular “Intel inside” pero en el mundo de la cocina.
[pull_quote_left]Queremos crear
el GPS culinario.
Una cocina guiada
y automatizada. [/pull_quote_left]“Lo que nosotros estamos creando es una plataforma de connected food, una capa de una inteligencia (food intelligence) que pueda ser integrada en la cocina. La idea es que esta tecnología, estas capacidades se incorporen a los electrodomésticos y a los dispositivos que de esta forma serían “Innit Empowered”.
Así que, continuando con el paralelismo con el gigante de los procesadores, una de las principales misiones del equipo de Innit, será crear un ecosistema de fabricantes y desarrolladores de utilidades o servicios, basados en esta plataforma, que sean apetecibles para el usuario.
“Estamos hablando con algunos de los big players de la industria –de hecho la compañía ha llegado a un acuerdo de colaboración con Whirpool. Y creemos que irá desarrollándose desde la gama alta a las gamas más básicas. Al fin y al cabo, el coste de incluir WiFi en los electrodomésticos no es tan alto. Sin embargo, no basta con la conectividad. De momento no hay mucho que hacer con ella. Están construyendo los cines, pero todavía no tienen películas. Por ejemplo, junto con Whirpool lo que queremos proporcionar es una experiencia de cocina guiada y automatizada. Esencialmente un GPS de la cocina que lleve al usuario a nuevos destinos culinarios.”
Ecosistema de partners
Actualmente, la tecnología de Innit esta integrada en los hornos de su marca premium Jenn-Air. La plataforma dispone de una serie de recetas digitales y una base de datos de medio millón de productos. Las recetas, han sido codificadas de forma que pueden enviarse mediante WiFi al horno, dándole las instrucciones sobre el tipo de cocción, temperatura, tiempo, incluso en varios pasos. En el futuro, está previsto que los hornos incorporen cámaras y sensores avanzados que puedan reconocer los alimentos, autoprogramarse y hacer los ajustes necesarios durante el proceso de forma automática. La plataforma de Innit llega también a los sistemas de almacenamiento –frigoríficos o salas de frío- zonas de preparación y , en el futuro, hasta la compra y el servicio.
[pull_quote_left]Estudiamos cómo evolucionan los nutrientes para crear metodologías y modelar los resultados. [/pull_quote_left]Como en otros ecosistemas, la clave para que triunfe una tecnología es el una equilibrio correcto en el binomio hardware-software, dispositivo-aplicación, tecnología-servicio, y un tercer elemento en la ecuación, llegar en el momento adecuado para satisfacer una demanda específica o ser capaces de generarla. En este caso, para imaginar esa cocina del futuro, los responsables de Innit están pensando principalmente en el mercado americano.
“Partimos de cómo es el ciclo de la comida en casa. Cómo compras, cómo almacenas, cómo preparas la comida. Lo que hacemos nosotros es aglutinar todas las aportaciones que están surgiendo al respecto (cámaras en la nevera, sensores, espectrómetros, conectividad, etc., y crear una capa de inteligencia por encima de ellos que permita dar sentido a todos esos inputs que recibimos. Desde identificar los alimentos, su estado, posibles alérgenos o fecha de caducidad hasta ofrecer ideas, recetas o sugerencias, incluso adaptadas a nuestro perfil o preferencias.
Empezaremos comprobando desde el móvil lo que tenemos en la nevera y terminaremos preguntándole, ¿qué cenamos hoy? A partir de ahí, podemos tener asistencia para hacer la compra, o para tomar decisiones, 
y el siguiente paso será conectar directamente con el mercado para que nos envíe los ingredientes que nos falta para una receta. Lo que intentamos es conectar la comida. La comida y tú, sois las estrellas y queremos dotar a todos los electrodomésticos de esta inteligencia para sacar todo su valor.» Esta es la película que imagina Innit para proyectarse en las cocinas inteligentes del futuro próximo.
La nueva inyección de capital de $18 millones, procedente del propio equipo fundador e inversores privados procedentes del sector food y tecnológico, eleva a $43 millones el capital disponible, y servirá a Innit para continuar desarrollando su plataforma e invirtiendo en investigación. “Por ejemplo, estamos realizando un estudio con el Gobierno Francés sobre cómo evolucionan los alimentos mientras se cocinan. El objetivo es no solo crear platos adecuados y deliciosos, sino que conserven todos sus nutrientes. Ahora esto es posible. Por eso estamos haciendo esta investigación fundamental y desarrollando metodologías con nuestro equipo científico para medir y predecir los resultados. El objetivo es que con alguno de estos sofisticados programas podamos modelar lo que pasa con los nutrientes, cómo se ven afectados. Al final la idea es empoderar al usuario con opciones, con información y sugerencias para que pueda tomar decisiones adecuadas. “
La estrategia de Innit pasa también por desarrollar un ecosistema integrado por proveedores de alimentación –supermercados, u otros actores como meal kits, etc-, y, por supuesto, fabricantes de electrodomésticos como Whirpool, o retailers, como la cadena de tiendas para el hogar Pirch, en cuya flagship del Soho neoyorkino Innit realiza demostraciones y clases de cocina con gran éxito. “Tenemos una visión común de cómo podemos ayudar a las personas a llevar una vida más saludable y sabrosa que compartimos con chefs y consumidores.”
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